12-01-2007, 10:55 PM
Al mismo tiempo, se fundaba la iglesia pentecostal. Los primeros cristianos hablaban en lenguas. La Biblia dice: "Y quedaron perplejos y asombrados, y se preguntaban unos a otros: ¿Qué significa esto?". Bueno, creo que yo puedo responder a esa pregunta. Era una epidemia vírica. El virus Ashera había estado presente, acechando entre la población, desde el triunfo de los deuteronomistas.
Las medidas de higiene de la información practicadas por los judíos lo habían mantenido a raya. Pero los primeros días del cristianismo debieron de ser muy caóticos. Había montones de radicales y librepensadores por todas partes que se burlaban de la tradición. Nostálgicos de los días de la religión prerracional. De Sumer. Y, como era de esperar, comenzaron a hablar entre
sí en la lengua del Edén.
El tronco principal de la Iglesia Católica se negó a aceptar la glosola-lia. Durante siglos la vieron con preocupación, hasta purgarla oficialmente en el Concilio de Constantinopla, en el año 381. El culto glosolálico permaneció en los márgenes del mundo cristiano. La Iglesia podía aceptar un poco de xenoglosia si ayudaba a convertir a los infieles, como en el caso de san Luis Bertrand, que convirtió a millares de indios en el siglo dieciséis, extendiendo la glosolalia por el continente más deprisa que la viruela. Pero
en cuanto esos indios estuvieron convertidos, se esperaba de ellos que cerrasen el pico y hablasen latín como todos los demás.
La Reforma abrió la puerta un poco más. Pero el pentecostalismo no despegó
realmente hasta el año 1900, cuando un pequeño grupo de estudiosos de la Biblia afincados en Kansas comenzó a hablar en lenguas. Extendieron la práctica a Texas. Allí recibió el nombre de Movimiento del Renacimiento. Se extendió como la pólvora por todos los Estados Unidos, y luego por el resto del mundo, llegando a China y la India en 1906.
Los medios de comunicación, la alta tasa de alfabetización y los transportes de alta velocidad del siglo veinte fueron estupendos vectores de la infección. Durante un acto religioso abarrotado de gente o en un campamento de refugiados del Tercer Mundo, la glosolalia se extendía de una persona a otra tan deprisa como el pánico. En los ochenta, el número de pentecos-tales en todo el mundo ascendía a varias decenas de millones.
Y luego llegaron la televisión y el Reverendo Wayne, respaldados por el inmenso poder mediático de L. Bob Rife. Se le puede seguir la pista a la conducta que promueve el Reverendo Wayne a través de sus espectáculos televisivos, panfletos y franquicias, en una línea ininterrumpida hasta los cultos pentecostales de los primeros cristianos, y de ahí a los cultos paganos de glosolalia. El culto de Ashera vive. Las Puertas Perladas del Reverendo Wayne son el culto de Ashera.
Pag 227.
Las medidas de higiene de la información practicadas por los judíos lo habían mantenido a raya. Pero los primeros días del cristianismo debieron de ser muy caóticos. Había montones de radicales y librepensadores por todas partes que se burlaban de la tradición. Nostálgicos de los días de la religión prerracional. De Sumer. Y, como era de esperar, comenzaron a hablar entre
sí en la lengua del Edén.
El tronco principal de la Iglesia Católica se negó a aceptar la glosola-lia. Durante siglos la vieron con preocupación, hasta purgarla oficialmente en el Concilio de Constantinopla, en el año 381. El culto glosolálico permaneció en los márgenes del mundo cristiano. La Iglesia podía aceptar un poco de xenoglosia si ayudaba a convertir a los infieles, como en el caso de san Luis Bertrand, que convirtió a millares de indios en el siglo dieciséis, extendiendo la glosolalia por el continente más deprisa que la viruela. Pero
en cuanto esos indios estuvieron convertidos, se esperaba de ellos que cerrasen el pico y hablasen latín como todos los demás.
La Reforma abrió la puerta un poco más. Pero el pentecostalismo no despegó
realmente hasta el año 1900, cuando un pequeño grupo de estudiosos de la Biblia afincados en Kansas comenzó a hablar en lenguas. Extendieron la práctica a Texas. Allí recibió el nombre de Movimiento del Renacimiento. Se extendió como la pólvora por todos los Estados Unidos, y luego por el resto del mundo, llegando a China y la India en 1906.
Los medios de comunicación, la alta tasa de alfabetización y los transportes de alta velocidad del siglo veinte fueron estupendos vectores de la infección. Durante un acto religioso abarrotado de gente o en un campamento de refugiados del Tercer Mundo, la glosolalia se extendía de una persona a otra tan deprisa como el pánico. En los ochenta, el número de pentecos-tales en todo el mundo ascendía a varias decenas de millones.
Y luego llegaron la televisión y el Reverendo Wayne, respaldados por el inmenso poder mediático de L. Bob Rife. Se le puede seguir la pista a la conducta que promueve el Reverendo Wayne a través de sus espectáculos televisivos, panfletos y franquicias, en una línea ininterrumpida hasta los cultos pentecostales de los primeros cristianos, y de ahí a los cultos paganos de glosolalia. El culto de Ashera vive. Las Puertas Perladas del Reverendo Wayne son el culto de Ashera.
Pag 227.
Marco Antonio Arenas Chipola fue expulsado por insultar a mujeres y reclutador para sectas. Se confirma en el año 2009 que ha sido reclutado por la secta templo de la serpiente emplumada, y que realizó robo de un perro con pedigree hacia nuestra AC, además de despojo a su maestro de artes Marciales, Hoffner Long.
