01-20-2006, 12:13 AM
Apropiación del chamanismo
Los estudios del chamanismo pueden dividirse en dos grandes períodos: 1) una primera etapa en donde se interpreta el chamanismo desde una perspectiva patológica y como una práctica basada en supersticiones; y 2) una segundo período en donde existe una tendencia a romantizar el chamanismo y a utilizarlo como modelo ideal para el desarrollo personal (Cowan, 1996; Meadows, 1991).
En el primer período los científicos sociales se interesaron en el chamanismo por ser una práctica cultural de pueblos "subdesarrollados" y por su carácter excéntrico. Esta actitud los llevó a considerar al chamán como un individuo anormal y con tendencias esquizoides. A finales de los 70's surge un movimiento que considera que los estudios en torno al chamanismo estaban plagados de prejuicios y etnocentrismo. Esta reconsideración y revaloración del chamanismo ha tenido como consecuencia que se interesen por el mismo grupos de la nueva era, escuelas de psicología transpersonal, la psicología junguiana y movimientos ambientalistas (Noel, 1997; Sandner & Wong, 1997; Smith, 1997). Estos grupos han encontrado en el chamanismo una visión de mundo que se adapta muy bien a sus intereses y perspectivas filosóficas. Debido a esto, hoy encontramos en los Estados Unidos y otras partes del mundo centros de estudios chamánicos que tienen como objetivo enseñarle a las personas a utilizar las técnicas chamánicas para su desarrollo personal y resolución de problemas (Harner, 1990; Ingerman, 1991, 1993). Existen también enfoques terapéuticos basados en el chamanismo y modelos de servicios de salud mental que intentan integrar métodos chamánicos (Doore, 1988).
Esta apropiación del chamanismo por los occidentales ha sido criticada por varios investigadores (Noel, 1997; Atkinson, 1992). Se argumenta que el proceso de convertirse en chamán se da en un contexto cultural diferente al de la sociedad contemporánea. De acuerdo a esta lógica, enseñarle a un occidental a convertirse en chamán puede ser contraproducente e inapropiado. Además, se considera que se están utilizando y explotando estas técnicas chamánicas sin ningún tipo de conciencia sobre las consecuencias para el individuo y la sociedad.
Los estudios del chamanismo pueden dividirse en dos grandes períodos: 1) una primera etapa en donde se interpreta el chamanismo desde una perspectiva patológica y como una práctica basada en supersticiones; y 2) una segundo período en donde existe una tendencia a romantizar el chamanismo y a utilizarlo como modelo ideal para el desarrollo personal (Cowan, 1996; Meadows, 1991).
En el primer período los científicos sociales se interesaron en el chamanismo por ser una práctica cultural de pueblos "subdesarrollados" y por su carácter excéntrico. Esta actitud los llevó a considerar al chamán como un individuo anormal y con tendencias esquizoides. A finales de los 70's surge un movimiento que considera que los estudios en torno al chamanismo estaban plagados de prejuicios y etnocentrismo. Esta reconsideración y revaloración del chamanismo ha tenido como consecuencia que se interesen por el mismo grupos de la nueva era, escuelas de psicología transpersonal, la psicología junguiana y movimientos ambientalistas (Noel, 1997; Sandner & Wong, 1997; Smith, 1997). Estos grupos han encontrado en el chamanismo una visión de mundo que se adapta muy bien a sus intereses y perspectivas filosóficas. Debido a esto, hoy encontramos en los Estados Unidos y otras partes del mundo centros de estudios chamánicos que tienen como objetivo enseñarle a las personas a utilizar las técnicas chamánicas para su desarrollo personal y resolución de problemas (Harner, 1990; Ingerman, 1991, 1993). Existen también enfoques terapéuticos basados en el chamanismo y modelos de servicios de salud mental que intentan integrar métodos chamánicos (Doore, 1988).
Esta apropiación del chamanismo por los occidentales ha sido criticada por varios investigadores (Noel, 1997; Atkinson, 1992). Se argumenta que el proceso de convertirse en chamán se da en un contexto cultural diferente al de la sociedad contemporánea. De acuerdo a esta lógica, enseñarle a un occidental a convertirse en chamán puede ser contraproducente e inapropiado. Además, se considera que se están utilizando y explotando estas técnicas chamánicas sin ningún tipo de conciencia sobre las consecuencias para el individuo y la sociedad.
La consigna:<br />Mantener la Dignidad, la Fe, la Esperanza, el Respeto y el Honor. A traves de la Sabiduria, la Serenidad, la Sensibilidad y la Sencillez. regresar al Origen. <br /><br />Los seres humanos son libres excepto cuando la humanidad los necesita.<br />ORSON SCOTT CARD

