http://lacomunidad.elpais.com/apuntes-cien...cto-lo-dijo-un-
Escrito por Pere Estupinyà
01 Ago 2008 -
El efecto lo dijo un
Hace dos semanas participé en un curso de verano en la URV sobre comunicación científica. Durante el debate posterior a la charla, una profesora de secundaria me preguntó si yo creía que el hombre había llegado realmente a la luna.
- Mujer! claro que si
¿tu no?
- Si, si
bueno no se
como había oído que
En seguida alguien mencionó la teoría de la conspiración según la cual el alunizaje había sido un montaje cinematográfico.
Años atrás un grupo de loquesea se dedicó a analizar las grabaciones y negar que Armstrong hubiera pisado realmente la luna, argumentando sombras extrañas, movimientos sinsentido de la bandera
y otras evidencias que han sido refutadas con creces en numerosas ocasiones. No hay ningún experto que se precie manteniendo tal disparate. Sin embargo, la duda está impregnada en la mentalidad popular.
No doy más detalles sobre la teoría de la conspiración, porque si lo hago, al cabo del tiempo quizás sufriréis amnesia de fuente, y acabaréis citando como ciertas algunas frases que yo habré escrito para negarlas.
Conocí el término amnesia de fuente en un artículo del New York Times que hablaba de cómo el cerebro guarda, reprocesa y modifica los recuerdos con el tiempo, y cómo algunos grupos de intereses lo utilizan como estrategia para difundir falsas creencias. Por ejemplo: El 10% de americanos cree que Obama es musulmán. También lo han oído en algún sitio. Ni los responsables de expandir el bulo saben quien fue el primero en generar la falsa noticia. Pero eso importa. Lo relevante es crear incertidumbre.
Como soy consciente que muchos no llegaréis al final del post, menciono ahora algo a tener en cuenta frente a la lucha contra las pseudociencias:
No estoy haciendo ningún favor a Obama diciendo que no es musulmán. Todo lo contrario. Quizás algunos os encontraréis dentro de un tiempo en un sarao, saldrá el tema, tendréis amnesia de fuente, y acabaréis diciendo pues yo he oído no se donde que Obama es musulmán. Este mensaje es mucho más contagioso que el yo he oído que en EEUU algunos dicen que Obama es musulmán, pero en realidad no lo es.
Escollos dentro de la ciencia
A su vez, el artículo del NYT me recordó la presentación en el MIT del libro The secret History of the War on Cancer (la historia secreta de la guerra contra el cáncer). Su autora, Devra Davis, explicó la controversia que existía a mediados de siglo XX acerca de si el tabaco era realmente perjudicial para la salud.
Cuando a inicios de los 50 aparecieron los primeros estudios epidemiológicos que demostraban la relación entre tabaco y cáncer, la reacción de la industria tabacalera fue desacreditarlos. Durante un tiempo negaron que fumar provocara cáncer, e incluso ficharon científicos de renombre que lanzaban mensajes contradictorios a la opinión pública para crear incertidumbre. Es un truco no tan viejo: El efecto lo dijo un
. Si en los puntos suspensivos pones la palabra médico, científico, físico
ya se le presupone objetividad. Curioso. A veces se olvida que los científicos también son personas y pueden equivocarse, o mentir por intereses.
Parece un chiste que al final las tabacaleras cambiaran su estrategia y terminaran financiando investigaciones siguiendo la lógica de la viñeta cómica de la deecha: ¿Podría apresurarse a encontrar una cura contra el cáncer? Eso sería mucho más fácil que la prevención.
La historia del tabaco me recordó a algo que no es lo mismo, pero se le parece: En EEUU hay grupos de científicos, o profesores de la Universidad de X negando que el cambio climático sea real, o que esté causado por la actividad humana, o simplemente propugnando que no hay motivos de preocupación. Se llaman los deniers. La verdad, no hay tantos y tienen poquísimo prestigio académico, pero hacen ruido y siembran dudas en la opinión pública. Y las dudas generan parálisis. Suficiente para algunos.
Hay más ejemplos, pero de nuevo, no quiero citarlos para no tentar a la amnesia de fuente. Hay demasiada ciencia buena o inocua como para dar cancha a la nociva.
Boicot a la pseudociencia
Varias veces me han preguntado porqué nunca cargo contra las pseudociencias (astrología, fenómenos paranormales
y otros timos) en el blog.
El principal motivo es que me enervan. A veces su sinsentido e irracionalidad logra enojarme. Ni me interesan ni me apetece en absoluto hablar de ellas. De nuevo, hay tanta ciencia buena por explicar que me da pereza fijarme en lo que no lo es.
Pero por otra parte, me da miedo que falsear las pseudociencias pueda tener un efecto contraproducente. Comparto plenamente la ideología escéptica y considero loable cualquier esfuerzo para fomentar el avance del pensamiento crítico . Pero pensando en la amnesia de fuente, si aquí cito algunas de las barbaridades pseudocientíficas que aparecen en medios de poco prestigio, aunque sea para desmentirlas, quizás las estoy fomentando entre los que ni siquiera sabíais de su existencia.
Los directores de la campaña de Obama no se esfuerzan en desmentir que sea musulmán. Esta palabra está prohibida. Su estrategia se basa en promulgar su cristianismo.
Yo prefiero emularles y no rebatir las pseudociencias sino intentar boicotearlas cuando pueda. Pero confieso mis dudas. Propongo debate.