10-12-2006, 11:07 PM
Sra. R. Burnier.. Presidente Soc. Teosófica
UN FUTURO SIN LÍMITES
Se ha dicho del hombre que es " un animal no terminado", lo cual sugiere que aunque delante de él se halle la posibilidad de volverse " un producto acabado", ese producto aún sería un animal.
Los estudiantes de filosofía esotérica no aceptarían tal punto de vista.
Aunque el hombre físico sea lo culminación del proceso evolutivo de los biólogos, aunque el nacimiento del espíritu-conciencia en formas cada vez más complejas y desarrolladas llegue a su plenitud en el hombre, el hombre no es el mero producto de ese proceso.
La posibilidad latente dentro de él es infinitamente mayor que la de tomar la forma de un animal perfecto y desarrollar las potencialidades de la naturaleza animal y de la forma animal, porque " el Alma del hombre es inmortal y su futuro es el futuro de algo cuyo crecimiento y desarrollo no tiene límites ".
Los Dhyan- Choans son fuerzas de la naturaleza, de doble aspecto.
Son los ' dioses' de los que creen en los poderes divinos extracósmicos.
Pero en realidad, no son agentes superhumanos existentes fuera de la naturaleza que dirigen y controlan los procesos naturales. Ellos son partes de la naturaleza misma.
Un aspecto de estas fuerzas es la 'energía bruta', irracional, inherente a la materia.
Aquí, 'energía bruta', no implica violencia, o brutalidad.
La palabra 'bruto', se refiere al funcionamiento y acción inconsciente, no racional, como son en una bestia o en un animal.
La energía bruta en la naturaleza opera por medio de leyes que son mecánicas e intrasgredibles.
Como la energía inherente en la naturaleza trabaja de acuerdo a un patrón inflexible, es posible predecir los efectos, así como alterar, neutralizar y controlar las condiciones.
Los Dhyan-Chogan son también el 'alma' inteligente o la conciencia cósmica que guía y dirige la energía bruta en la materia.
Desde la perspectiva de estos dos aspectos de la naturaleza, el hombre es tanto forma humana como ser humano.
La forma humana ha ido desarrollándose y está moldeada de acuerdo a los procesos de la naturaleza y está sometida a las leyes que son inherentes a la evolución.
La evolución, señala HPB. trae a la existencia objetiva lo que existe.
La objetivación se da en el plano de la ilusión.
Esto parece paradójico porque normalmente pensamos que lo que es objetivo es real, y lo que no es objetivo y tangible para nuestros sentidos, es irreal.
Los científicos generalmente niegan la existencia de lo que no es objetivo para ellos,- no necesariamente a nivel físico substancial- sino también lo que es objetivo para el intelecto en la esfera de la lógica.
Pero, de acuerdo a la enseñanza oculta, la proyección en la 'realidad' objetiva, coloca en el plano de la ilusión, las cosas percibidas.
UN FUTURO SIN LÍMITES
Se ha dicho del hombre que es " un animal no terminado", lo cual sugiere que aunque delante de él se halle la posibilidad de volverse " un producto acabado", ese producto aún sería un animal.
Los estudiantes de filosofía esotérica no aceptarían tal punto de vista.
Aunque el hombre físico sea lo culminación del proceso evolutivo de los biólogos, aunque el nacimiento del espíritu-conciencia en formas cada vez más complejas y desarrolladas llegue a su plenitud en el hombre, el hombre no es el mero producto de ese proceso.
La posibilidad latente dentro de él es infinitamente mayor que la de tomar la forma de un animal perfecto y desarrollar las potencialidades de la naturaleza animal y de la forma animal, porque " el Alma del hombre es inmortal y su futuro es el futuro de algo cuyo crecimiento y desarrollo no tiene límites ".
Los Dhyan- Choans son fuerzas de la naturaleza, de doble aspecto.
Son los ' dioses' de los que creen en los poderes divinos extracósmicos.
Pero en realidad, no son agentes superhumanos existentes fuera de la naturaleza que dirigen y controlan los procesos naturales. Ellos son partes de la naturaleza misma.
Un aspecto de estas fuerzas es la 'energía bruta', irracional, inherente a la materia.
Aquí, 'energía bruta', no implica violencia, o brutalidad.
La palabra 'bruto', se refiere al funcionamiento y acción inconsciente, no racional, como son en una bestia o en un animal.
La energía bruta en la naturaleza opera por medio de leyes que son mecánicas e intrasgredibles.
Como la energía inherente en la naturaleza trabaja de acuerdo a un patrón inflexible, es posible predecir los efectos, así como alterar, neutralizar y controlar las condiciones.
Los Dhyan-Chogan son también el 'alma' inteligente o la conciencia cósmica que guía y dirige la energía bruta en la materia.
Desde la perspectiva de estos dos aspectos de la naturaleza, el hombre es tanto forma humana como ser humano.
La forma humana ha ido desarrollándose y está moldeada de acuerdo a los procesos de la naturaleza y está sometida a las leyes que son inherentes a la evolución.
La evolución, señala HPB. trae a la existencia objetiva lo que existe.
La objetivación se da en el plano de la ilusión.
Esto parece paradójico porque normalmente pensamos que lo que es objetivo es real, y lo que no es objetivo y tangible para nuestros sentidos, es irreal.
Los científicos generalmente niegan la existencia de lo que no es objetivo para ellos,- no necesariamente a nivel físico substancial- sino también lo que es objetivo para el intelecto en la esfera de la lógica.
Pero, de acuerdo a la enseñanza oculta, la proyección en la 'realidad' objetiva, coloca en el plano de la ilusión, las cosas percibidas.
Quien vive rehuyendo el esfuerzo, cree que vive, pero en realidad vegeta

